Soy Eva luz feliz madre de dos hijas
maravillosas que Dios me prestó, Zyanya que actualmente tiene 18 años, una
chica responsable, desde muy pequeña muy independiente, lo contrario a Paloma
mi bella hija con síndrome de Down y ciega actualmente cuenta con 11 años.
Mi
esposo ya no quería hijos pero yo sí, tenía la ilusión de ser
madre de nuevo, pues mi hija mayor
creció tan rápido, que pronto dejo de ser un bebe; pero yo vivía con la ilusión de otro hijo.
Un día viendo el teletón mi esposo dijo que no tentáramos a la suerte,
ya que Dios nos había dado una hija sana ,fuerte, inteligente, una niña de 10, pero yo insistí a lo cual él comento si
me gustaría cuidar a una hija con síndrome de Down, en esos momentos pasaban un
caso en la tele, yo dije muy segura que
si, y mi esposo dijo que si también ciega, yo conteste que ¡No! Que sería
mucho.
Pasó el tiempo y de aquella conversación ya no
me acordaba, quede embarazada en el mes de abril, muy contenta se lo dije a mi
esposo; empecé con los chequeos médicos, todo marchaba muy bien, solo en una
ocasión al escuchar los latidos del corazón del bebe el doctor se puso
pensativo y yo le pregunte qué pasaba , luego el cambio su semblante y dijo que
nada que todo bien. Así transcurrió mi
embarazo. En el ultrasonido se vio
que sería niña ya tenía nombre para mi
pequeña Citlalli que significa estrella,
yo le hablaba y platicaba llamándola por su nombre.
Llegó el momento del nacimiento y yo entre con los nervios de toda
mamá dije Dios ayúdame!
Grande fue la sorpresa, no escuche su llanto, oí
que los practicantes murmuraban y decían
¡Mira, mira como que tiene algún tipo de síndrome! Yo pensé que no había
entendido bien, le hablaron a la pediatra y fue conmigo con mi hija en brazos y
me dijo dale un beso a la nena, nació con síndrome de Down, yo la bese la vi
estaba tan morada que creí que iba a ser mas morena que mi hija mayor, la doctora dijo que se la llevaba
a la incubadora porque necesitaba oxigeno, me sentía en las nubes flotando, a
la deriva.
Al
ratito entro mi esposo y le pregunte viste a la niña? Él contestó que sí ¿Viste que tiene síndrome de Down? ¡Sí! Pero eso no me preocupa tanto como su
problema de corazón, le habían
recomendado los doctores que no me dijera nada sobre su cardiopatía pero
mi esposo conociéndome opto por decírmelo ¡Mas angustia para mí! Vi a mi esposo
tan triste… que le dije que se saliera a
platicar con alguien, así lo hizo y fue con su hermana y mi cuñado, mas tarde
llego mi mamá, la enteraron de la situación de la niña, ella comento que en la
familia no había una niña asi, yo con todo el dolor que cargaba conteste pues
ya hay una.
Al día
siguiente fue la doctora y me dijo que fuera buscando un cura pues la niña tan
solo le quedaban unas horas, sentí como si me aplastaran y quedaba como una
tortilla; fue mi cuñada a visitarme y le comente lo que había dicho la pediatra
y ella salió en busca del cura para que bautizara a mi nena.
Me sorprendió que llegara tan rápido con el
cura, ya que para ella media hora es una hora. Fue mi comadre a visitarme y mi
cuñada fueron las madrinas de mi bella Paloma, nombre que decidí ponerle ya que
se la encomendé al Espíritu santo,
también por lo frágil que vi a mi hija
Y
citlalli por ese nombre ya lo había escogido para ella desde antes que
pensara en embarazarme. Fue una ceremonia corta pero muy emotiva, las lagrimas no me dejaban ver mucho; decidieron llevarse a Paloma a cuidados intensivos
a otro hospital donde se encuentran los mejores doctores, no pude acompañarla y mi esposo se fue con ella en la ambulancia,
ella en la incubadora llena de cables, mi esposo llorando, le dije que la
cuidara mucho que estaría esperándolos.
Pasaron 12 días y regresaron, yo no conocía el
llanto de Paloma y ella no conocía mi voz, solo la de su papi que entraba 5
minutos por la mañana y otros 5 por la tarde a platicar con ella, así que para
mi nena no existía otra voz que la de su papi, yo era una desconocida para
ella; como los vecinos ya sabían que llegaría ese día, vinieron con algunos
regalitos a conocerla, yo me sentía rara, todos me miraban, bueno así lo
sentía, tal vez veían la belleza que traía abrazada, pero era tanto mi miedo
por no conocer nada acerca del síndrome de Down que me sentía observada.
Paloma tomaba medicina para la presión por la
mañana y por la noche, yo la veía y lloraba, imaginando que la gente la iba a
rechazar o que la iba a ver con lastima, no sabía cómo reaccionar y solo me
daba por llorar, la ignorancia me cegó, no veía más que una niña con ojos
rasgados que por supuesto ahora son las ¡Más hermosos aunque no tengan luz! Sufrí
cuando pensé que no iba a asistir al kínder donde fue mi hija mayor, imaginaba
su futuro negro.
Fue pasando el tiempo la llevaba sus chequeos médicos
fuera de mi ciudad, un dia el doctor dijo que había que operarla que lo pensáramos
bien como pareja; en las tantas citas que lleve a mi nena vi muchos niños con
su tanque de oxigeno al lado, y pues decidimos que si con todo el dolor y la
preocupación, pedimos a Dios que iluminara las manos del doctor, antes de irnos
a operarla la llevamos a bautizar a la parroquia. Fue una celebración bonita y familiar.Paloma salió muy bien de su operación, muy fuerte mi chiquita y muy valiente, se recuperó muy rápido. Ahora era tiempo de enfocarnos a sus ojitos pues yo le notaba que no seguía los objetos, creía que tenía problemas de visión, yo la imaginaba con lentes, aunque mi esposo después me comento que él le noto desde que nació, se le veía sus ojitos como cuando mezclas el agua y el aceite, pero como primero se checo lo de su corazón los doctores no hicieron caso. La lleve al oftalmólogo, la miro con mucha ternura, me dijo que pues tenía muchos problemas en sus ojitos, menciono algunos, micro oftalmia, desprendimiento de retina, cataratas, etc, pero yo creo en su forma de consolarme me mando a la capital del estado a que le hicieran un ultrasonido, salió lo mismo y algunas cosas más que no recuerdo por su nombre científico, ahí decidieron mandarme a otro estado en donde había estado internada cuando nació, ahí están los mejores especialistas del país. Me toco ir sola con Paloma, le hicieron sus estudios la doctora dijo que no tenían solución sus ojos, ni siquiera con un trasplante, me dijeron que la llevara otra vez para que me dijeran el porqué de su ceguera, ya no fui después, si cuando la revisaron la hicieron llorar mucho y yo llorando con ella, ya no importaba el porqué, regrese a casa muy triste y desconsolada llorando le conté a mi esposo lo que él ya sabía, llore por muchos días, preguntando a Dios ¿porque? Mi esposo me consoló diciendo para que quería que Paloma viera este mundo, ahora entiendo que ella ve a su manera.
Desde los 4 meses Paloma va a una escuela especial, en la cual me han ayudado mucho tanto a ella como a mí, ha tenido excelentes maestras, he convivido con otras madres que viven una situación parecida a la mía, Confieso que llore mucho cuando llegue a la escuela ver tanto niño con discapacidad me estremeció, llore y abrace a mi hija fuertemente, pero pensé que ella necesitaba asistir a esa escuela y yo tenía que dejar de lado la impresión y recibir la ayuda para mi nena. Cuando regrese a mi casa no pude mas y llore, mi hija mayor solo me miraba tenía entonces 7 años, cerca de mi casa vive una señora que tiene unos gemelos que tienen acondroplastia, yo le dije a mi hija Zyanya que fuera con ella y le dijera que viniera, asi lo hizo y al ratito llego chuyita no me pregunto nada, solo me abrazo fuerte y me dijo que mi hija me necesitaba mucho que tenía que apoyarla en todo, estuvo un ratito diciéndome cosas que ya no recuerdo, y le agradecí que viniera, y se fue, yo me quede llorando, llego mi esposo y me dijo porque lloras? Le dije fui a la escuela -y por eso lloras? –Es que me dio mucha tristeza ver a tantos niños con discapacidad, él contesto de seguro lloras por todo el trabajo que vas a tener, solo dije no…
Un día me encontró llorando mi esposo y muy
molesto me dijo y ahora porque lloras? -Porque me da tristeza por eso lloro, el
me dijo que no perdiera el tiempo llorando que mejor la disfrutara que no
sabíamos cuanto tiempo la iba a dejar Dios con nosotros, que la hiciera feliz,
fue una tremenda sacudida y me propuse darle todo el amor a Paloma que fuera lo
más feliz posible, se fueron curando mis heridas, pedí a Dios fortaleza y
sabiduría para saber cómo enseñarle a mi hija el mundo.
Ahora la veo tan grande y hermosa, atrás ha
quedado esa tristeza que me producía el que es ciega, ella ve a su manera,
tocando, oliendo, probando, escuchando, esa es su forma de percibir las cosas.
Es una niña feliz, disfrutando todo lo que le rodea, trato de que participe
en todas las actividades de la escuela, desfiles, bailables, deporte en fin
todo lo que se pueda, como ella lo dice con una seguridad ¡Yo soy una campeona! ¡Sí que lo eres hija!
Yo la apoyo en lo que se pueda en la escuela,
si es preciso que me quede como lo he hecho en los 11 años que tengo asistiendo
a la escuela especial lo hago con mucho gusto, si hay que correr con ella pues
ahí estoy yo.
Y cuando no se requiere pues aquí ella solita
trabaja, fue un año donde tuvo una excelente maestra que me dijo váyase que yo me hago cargo de Paloma, y pues aquí la
ven aplicada trabajando, hermosa mi niña!
Paloma se ha convertido en mi musa y de muchos
otros también, participo en un portal literario donde le escribo a mi hija mis sentimientos,
pero también es fuente de inspiración de otros poetas del mundo, una muestra es
este bosquejo de una poetisa de Costa
Rica
Me da muchas satisfacciones mi pequeña, tantas
que nunca llegue a imaginar, que le pusiera alas a mis sueños, despertó en mi la creatividad, de plasmar sentimientos,
esfumo mis miedos y angustias, me da lecciones a diario, es mi dulce Paloma de
la paz.
Es un cántaro de miel inagotable, todos
llegamos a nutrirnos del amor de Paloma, que nos da paz de solo tocarla, sus besos
y abrazos son las más exquisitas golosinas esto es una prueba de ello, con su
hermana que la ama tanto!
Sin duda tengo las mejores hijas, las más
bellas, Las amo mis bellas, son mi sol y mi estrella! Mi constelación de amor.
No podía faltar mi roble, el que tiene
frondoso follaje en el cual yo me refugio en mis días nublados, mi héroe
por levantarme tantas veces, gracias, por ser el
amor de mi vida, el pilar de mi alma, porque sin ti vivo y por ti muero,
¡Te amo!
Gracias Paloma por ser una estrella en mi
camino… ¡Te amo!